ESTILO | Dickies apuesta por la calidad en la manufactura de México
Fundada en 1922 con la misión de ofrecer prendas de ropa de trabajo innovadoras, resistentes y a buen precio, Dickies ha continuado su evolución adaptándose a las demandas del mercado al tiempo que se mantiene fiel a su compromiso original.
En las décadas de los 80 y 90, la marca creció debido a la atracción que creó con públicos más jóvenes, siendo adoptada por una gran variedad de subculturas, incluyendo la cultura urbana latina, los skaters y personalidades de la talla de Gwen Stefani o Fred Durst.
Esta evolución introdujo una fuerte demanda de prendas Dickies, así que la compañía buscó satisfacerla con manufactura de calidad y precio justo, apostando por la infraestructura industrial en el norte del país, inaugurando así en 1993 su planta de producción en Zaragoza, Coahuila.
De acuerdo con datos oficiales del gobierno de Coahuila, el sector industrial en el estado tiene un peso mayor que el promedio de todos los estados, con una participación de 44%. Su ingreso per cápita es de 126 mil pesos por año –20% mayor que el nacional– y es la séptima entidad con el valor más alto. Además, la productividad de mano de obra en la industria manufacturera es la más elevada de México: 37,443 dólares anuales en promedio.
Adicionalmente, y de acuerdo a la American Apparel & Footwear Association (Asociación Estadounidense de Ropa y Calzado), México posee una fuerte ventaja sobre otros puntos de inversión en el mundo: mientras que Estados Unidos goza de la infraestructura para producir telas, hilos y otros aditamentos, México tiene mejores cualidades para cortar y confeccionar. Esto significa que textiles estadounidenses son enviados al país para producción y acabados finales.
El 874, con más de 100 variaciones de tamaño y a la venta en más de 50 países alrededor del mundo es uno de los productos protagónicos en Zaragoza, en donde se da el acabado final y se confeccionan 1,900,000 pantalones 874 de los 4,750,000 hechos en el mundo, lo que representa el 40% del total de la producción.
Así, México ha sido uno de los principales aliados en la popularidad de la prenda más icónica de Dickies, el pantalón de trabajo 874, que este año celebra 50 años de ser el primer pantalón en incluir funciones como resistencia a las arrugas, ser repelente a las manchas y contar con planchado permanente, ayudando a otorgarle mucho valor y demanda entre, no sólo trabajadores de diversas industrias como el sector hospitalario, petrolero, manufacturero, automotriz, o construcción, sino para las personas en general que gustan del 874 para uso casual debido a su estilo, comodidad y versatilidad.
