SOCIAL | Bendix celebra el 30 Aniversario de su operación de manufactura en Acuña
Primero fue la Planta I, en mayo de 1988. ¿Su función? El ensamblaje y producción de OEM para la unidad de negocios de Controles. Luego fue la Planta II, en el 2000, para refabricación y servicios de OEM como parte de la unidad de Carga. En el 2010, la Planta III se inauguró para fabricar productos de accionadores. La cuarta planta, un activo centro de logística, se unió a la operación el pasado otoño.
Un parque industrial en constante crecimiento compuesto por cuatro plantas con tecnología de punta: Bienvenido a Acuña, México, la operación de fabricación de Commercial Vehicle Systems LLC. Conforme la operación llega a su 30 aniversario, Bendix celebra este logro y atribuye el éxito de la planta a su diverso portafolio empresarial, su crecimiento medible, la dedicación de sus empleados y su participación comunitaria.
La operación de Bendix en Acuña emplea a más de 2,000 trabajadores y abarca un área de 48,402 metros cuadrados. Más de una docena de empleados trabajan en la operación desde sus inicios. Bendix Acuña también apoya un centro de distribución en la Ciudad de México que atiende a clientes sudamericanos y alberga la sede de los equipos mexicanos de ventas, capacitación y soporte técnico para el mercado secundario y OEM.
Acuña representa una de las plantas de fabricación de mayor crecimiento de Bendix, y los ejecutivos de Knorr-Bremse Group, la compañía matriz de Bendix, la consideran una planta de fabricación modelo. Knorr-Bremse reconoció la operación de Acuña como su mejor planta en el 2011. Bendix recientemente expandió su presencia en México con la inauguración de un nuevo Centro de Investigación y Desarrollo de Ingeniería en Monterrey.
“A lo largo de 30 años, Bendix Acuña ha acumulado una cantidad notable de logros: desde iniciativas de crecimiento y la expansión de sus capacidades de producción de alta tecnología hasta esfuerzos de apoyo comunitario profundamente significativos”, dijo Carlos Hungría, director de operaciones en Bendix. “Igualmente importante, los hombres y las mujeres de la operación de Acuña la han convertido en un ciudadano corporativo valioso en sus comunidades locales en México y en Del Rio, Texas, la ciudad hermana de Acuña al otro lado de la frontera con Estados Unidos”.
Centro de alta tecnología
Bendix, el líder norteamericano en desarrollo y fabricación de tecnologías activas de seguridad, manejo de aire y sistemas de freno para vehículos comerciales, invierte continuamente en capacidades de producción de alta tecnología para la operación de Acuña.
“A medida que el mercado de vehículos comerciales continúa evolucionando, nuestras operaciones de fabricación también evolucionan. Constantemente implementamos una mayor automatización y ensamblaje de alta tecnología en la planta para mejorar nuestra productividad y nuestra capacidad de cumplir o superar las expectativas tanto de los fabricantes de equipo original como de las flotillas”, dijo Jackie Pérez, gerente de la planta de Bendix en Acuña. “Las mayores capacidades de producción de alta tecnología en Acuña motivan a nuestra fuerza laboral a luchar por alcanzar la excelencia y nos permiten satisfacer la creciente demanda de nuestros clientes de manera más flexible y con el desempeño, calidad y confiabilidad que distinguen a Bendix”.
Con el fin de satisfacer la creciente demanda de los clientes, Bendix recientemente duplicó las capacidades de fabricación de la planta —a través de la optimización y expansión de las líneas de producción— para el desarrollo de válvulas solenoide y colectores ensamblados de alto rendimiento.
Con una inversión de $1.5 millones de dólares entre el 2015 y 2016, Bendix agregó una nueva línea de producción de válvulas solenoide de bajo flujo y una nueva línea de colectores en su planta de ensamblaje de alta tecnología, lo que permitió aumentar la capacidad, ofrecer pedidos personalizados y realizar entregas puntuales.
En octubre de 2016, después de una inversión de $4.6 millones de dólares, Bendix inició la producción de módulos de control de conductor (DCM, por sus siglas en inglés) en una nueva y avanzada línea de producción en la planta de Acuña. Los módulos —subensamblajes complejos prefabricados y previamente probados— se producen para Navistar, Inc. y se utilizan en vehículos medianos, Clase 8 y militares.
Para la nueva línea de DCM, Bendix invirtió en una sofisticada tecnología de línea de producción, capacitó extensamente a los operadores en el proceso de ensamblaje de alta tecnología y agregó nuevas medidas de calidad rigurosas.
Retribución
Bendix Acuña también ha sido reconocido por su amplia participación comunitaria, que data de la fundación de la planta.
La operación, que cuenta con el apoyo del programa Knorr-Bremse Global Care, financió la construcción de una biblioteca comunitaria, las mejoras de infraestructura en escuelas cercanas y la limpieza e instalación de un parque infantil. Bendix también ayudó a financiar la construcción de un nuevo orfanatorio local, a reconstruir las casas de los sobrevivientes del tornado y a adquirir una ambulancia para la delegación estatal de la Cruz Roja Mexicana.
En los últimos dos años, Bendix lanzó dos iniciativas educativas. Primero, la compañía desarrolló un curso técnico de fabricación liviana de 180 horas para los jóvenes en situación de riesgo de Acuña. Segundo, Bendix ayudó a construir un laboratorio de producción industrial avanzada para una escuela técnica vocacional local. Bendix también brindó una oportunidad de formación dual a los estudiantes seleccionados de la escuela vocacional, además de impartir capacitación práctica para los estudiantes en la planta de Acuña.
Por otra parte, Bendix apoya a los recaudadores de fondos para la iniciativa de lucha contra el cáncer “Relay For Life”, a los equipos deportivos locales y al equipo de robótica de Del Rio High School.
“La responsabilidad social está en nuestro ADN, tanto hacia la compañía como hacia la gente que trabaja aquí”, dijo Pérez. “La retribución está profundamente integrada en nuestros valores corporativos. Este compromiso con nuestra comunidad local se demuestra a diario en toda la empresa”.
Internamente, la operación de Bendix en Acuña brinda cursos de educación primaria, secundaria y preparatoria impartidos por profesores certificados que asesoran y aplican los exámenes que exige el estado. Más de 258 empleados se han graduado en los últimos 19 años gracias a estos cursos.
Esfuerzo adicional
“Las personas que trabajan aquí son el corazón, alma y columna vertebral de Bendix Acuña y no podríamos estar más orgullosos de nuestra dedicada familia de empleados. Sus contribuciones son indispensables tanto para nuestro liderazgo en la industria de vehículos comerciales como para nuestro crecimiento continuo”, dijo Pérez. “Su diligencia también es clave para nuestro sólido historial en seguridad, permitiendo a los empleados en las Planta I y II de Acuña cumplir un año sin lesiones registradas durante 2017 y en 2018 respectivamente, mientras que nuestro equipo de la Planta III de Acuña alcanzó mas de 1.5 millones de horas sin afectaciones en sus tiempos por lesiones en 2017.
Adicionalmente, los empleados ayudan a impulsar nuestros esfuerzos ambientales, conforme Bendix se acerca a cumplir su objetivo de ser 100% libre de vertederos en el 2020; y a impulsar nuestras iniciativas de apoyo comunitario que ayudan a Bendix Acuña a ser una fuerza positiva para el bien local”.
Las siguientes opiniones de algunos empleados —en los equipos que celebran 30 años en la operación de Acuña— demuestran lo que muchos en la fuerza laboral de Acuña sienten por la compañía.
“La compañía me ha ayudado a prepararme, y hoy puedo hacer lo que más me gusta, lo que me apasiona, que es tratar con la gente”, dice Isabel Monsivais, asistente de recursos humanos. “Para mí es una gran satisfacción poder ayudar a mis compañeros y eso lo puedo hacer, y hacerlo bien, gracias a Bendix”.
Alfredo Pérez, un técnico en el Laboratorio de Metrología, afirma: “Me alegra celebrar 30 años de trabajo en Bendix. El futuro es continuar evolucionando, aprendiendo y cumpliendo mis metas establecidas”.
Rosy Sanjuan, inspectora de calidad, comenta: “Después de 30 años, para mí Bendix es mucho, es todo. Me siento muy agradecida con Dios por haberme traído a esta planta cuando tenía 22 años. Me permitió tener hijos y darles una educación. Mi esposo y uno de mis hijos ahora trabajan aquí. Tengo 53 años y considero a Bendix mi familia”.